sábado, 8 de noviembre de 2008

Discriminación

—Madre ¿porqué los niños no quieren jugar a la pelota conmigo? 
—Hijo, deja que ellos jueguen sus juegos. No son malos; solamente temen a los desconocidos. Ahora, se bueno y quédate quietito en tu ataúd.

No hay comentarios.: